Caverna de más de 200 metros de profundidad, 80 mts de ancho y 30 mts de alto.

El principal atractivo del Monumento Natural Cueva del Milodón es la caverna que recibe su nombre al ser allí donde fueron encontrados los restos de un animal prehistórico perteneciente a la orden de los edentados, herbívoro conocido como Milodon darwini. La caverna posee 400 mts de recorrido interno, donde tras llegar a su fase final se encuentra una réplica tamaño natural del animal prehistórico.

Ubicado sobre el techo de la Cueva del Milodón, ofrece a los visitantes una espectacular panorámica del fiordo Eberhard y sus canales, así como de las montañas y glaciares circundantes.

Desde este mirador es posible apreciar en el paisaje las huellas de antiguos lagos glaciares.

Este sitio, de 13.000 años de antigüedad máxima, es uno de los más importantes de Sudamérica. En su entorno se han encontrado evidencias arqueológicas relacionadas con las primeras ocupaciones humanas de la Patagonia.

Con anterioridad a estas ocupaciones, la caverna también fue utilizada por animales tales como milodones, panteras, tigres dientes de sable, zorros, caballos y diversas especies de camélidos.

Los indicadores de antiguas ocupaciones humanas consisten en abundantes artefactos de piedra que incluyen puntas cola de pescado, además de varios fogones y restos de fauna extinta, los cuales se remontan a 11.000 años atrás. La evidencia arqueológica indica que, tanto los camélidos como el caballo, eran las presas preferidas por los humanos.

Los humanos también ocuparon esta cueva después de la desaparición de la megafauna. Las evidencias arqueológicas sugieren que el guanaco era el principal recurso de estos grupos cazadores recolectores.

Aunque no sorprende por su amplitud, sí lo hace por su profundidad, pues se sumerge en las entrañas del cerro Benítez.

Está rodeada por una zona de bosque nativo antiguo, que permite a los visitantes imaginar cómo era la flora de esta zona antes de la llegada de los colonos.

La silla del Diablo es otro sendero llamativo es un bloque de roca de 35 mts. de altura que ya forma parte de la mitología de Ultima Esperanza.

Durante mucho tiempo se pensó que era un bloque errático, luego esta idea se descartó ya que tiene la misma composición geológica que el cerro Benítez.